El gran juez persiste
en su absurdo devenir
de muros y castillos
sin risas ni aplausos
abuelo de infiernos
ocupados por la fuerza
todos acatan con molestia
su despachos de caprichos
se mueven como insectos
de informal subsistencia
lamentan su oprobio
de vivir en los sótanos
como restos biomorfos
olvidados de una especie
que hizo del consumo
su religión por docena
habitantes de un vacío
solo existen en los bordes
de grietas malolientes
son parte de un decorado
espasmódico de espejismos
secuestrada comparsa
de candelabros sin cirios
donde ya no duele la sombra
ni importa el castigo.
"...exorcizamos una fealdad mucho más profunda que nos atormenta, nos aterroriza y quisieramos desesperadamente ignorar, fingiendo que todo es mero fingimiento" Umberto Eco
martes, 26 de agosto de 2025
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)

No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Dejá tu opinión